ué es la fitball y por qué deberías probarla?
La fitball, también conocida como pelota suiza o pelota de pilates, es una herramienta versátil que puedes usar para entrenar todo el cuerpo.
Su principal ventaja es que introduce una dosis de inestabilidad en tus ejercicios, lo que activa más grupos musculares, especialmente en el core, y mejora tu equilibrio, coordinación y postura.

Ideal para todos los niveles, la fitball es perfecta para principiantes, ya que permite trabajar con el peso corporal, sin necesidad de mancuernas o máquinas del gimnasio.
Además, puedes realizar tu rutina en el suelo de tu casa, con poco espacio y sin impacto para tus articulaciones.

Beneficios de entrenar con fitball
Entrenar con fitball tiene múltiples beneficios:
- Mejora el equilibrio y la estabilidad corporal;
- Refuerza la musculatura profunda, especialmente del abdomen, espalda y pelvis;
- Favorece una mejor postura y alineación de la columna;
- Aumenta la coordinación y la propriocepción;
- Tonifica zonas clave como glúteos, piernas, brazos y hombros;
- Ayuda a prevenir lesiones al fortalecer el core y estabilizar las articulaciones;
- Puede formar parte de rutinas de pilates, yoga o entrenamiento funcional.
Consejos antes de empezar
Antes de comenzar con tu rutina de ejercicios con fitball, ten en cuenta estos consejos:

- Elige la pelota adecuada según tu estatura: Si mides entre 1,55 m y 1,70 m, una pelota de 55 cm suele ser la ideal. Si mides más de 1,70 m, opta por una de 65 cm o 75 cm;
- Infla la pelota correctamente para que mantenga la forma y proporcione la inestabilidad justa;
- Usa una superficie antideslizante, como una esterilla o alfombra;
- Mantén el control del movimiento y prioriza la postura;
- Si es tu primera vez, realiza los ejercicios cerca de una pared para mayor seguridad.
Fitball: ejercicios para principiantes
A continuación, te mostramos una rutina básica de fitball para principiantes.
Puedes hacer esta serie 2-3 veces por semana, con 10-12 repeticiones por ejercicio y 30 segundos de descanso entre cada uno.

1. Puente de glúteos sobre fitball
- Tumbada boca arriba en el suelo, coloca los pies sobre la pelota y los brazos extendidos a los lados;
- Eleva la cadera contrayendo los glúteos, formando una línea recta de rodillas a hombros;
- Baja lentamente sin perder la estabilidad.
Activa: glúteos, isquiotibiales, core

2. Plancha con pies sobre la fitball
- Apoya los antebrazos en el suelo y los pies sobre la pelota;
- Mantén el tronco recto, activando el abdomen y evitando que la cadera caiga;
- Mantén la posición durante 20-30 segundos.
Activa: transverso abdominal, espalda, hombros

3. Sentadillas con fitball en la pared
- Coloca la pelota de pilates entre tu espalda baja y una pared;
- Flexiona las rodillas, bajando lentamente hasta formar un ángulo de 90°;
- Vuelve a subir empujando con los talones.
Activa: piernas, glúteos, core

4. Flexión de pecho con manos sobre la fitball
- En posición de plancha, coloca las manos sobre la pelota;
- Flexiona los codos para bajar el pecho hacia la pelota, y vuelve a subir con control.
Activa: pecho, brazos, core
5. Rotación del tronco sentada sobre la fitball
- Siéntate sobre la pelota, con la espalda recta y pies firmes en el suelo;
- Sujeta una toalla o palo frente al pecho y gira el tronco de un lado al otro, manteniendo la cadera estable.
Activa: oblicuos, abdominales, equilibrio

6. Abducción de piernas en posición lateral
- Túmbate de lado en el suelo con la pelota entre los tobillos;
- Eleva ambas piernas manteniendo la pelota en su lugar.
Activa: abductores, core, coordinación
¿Qué tener en cuenta si eres principiante?
Si estás comenzando, es importante:
- Realizar movimientos lentos y controlados;
- Prestar atención a la contracción muscular, especialmente en el abdomen;
- Escuchar tu cuerpo: si un ejercicio te resulta muy difícil, haz una versión más simple o descansa;
- Incorporar la fitball de forma progresiva a tus rutinas habituales.
¿Puedo usar la fitball si tengo molestias o lesiones?
Sí, pero con precaución.
La fitball es una excelente herramienta para la rehabilitación y el trabajo postural, pero si tienes alguna lesión en la columna, rodillas o cadera, es fundamental consultar con un profesional antes de iniciar.
Asegúrate de adaptar el nivel de exigencia y usar la pelota para movimientos suaves y controlados.

Fitball y pilates: la combinación perfecta
En Buddyfit, muchas de nuestras clases de pilates incorporan la fitball como aliada para mejorar la activación muscular, la movilidad y la tonificación general.
Es una excelente forma de sumar variedad a tu entrenamiento y conectar con tu cuerpo desde el centro.

Empieza hoy tu entrenamiento con fitball
Ya sea que busques fortalecer el core, tonificar los glúteos, mejorar tu postura o simplemente moverte más, la fitballes una gran opción.
Es segura, divertida y accesible para todos los niveles.
Además, puedes seguir clases guiadas por entrenadores expertos directamente desde casa, sin preocuparte por tener que ir al gimnasio.
¿Te animas a probarla?

¿Cuál es el mejor momento para entrenar con fitball?
Uno de los beneficios de entrenar con fitball en casa es que puedes adaptar el entrenamiento a tus propios objetivos y horarios.
No necesitas una hora específica ni un espacio amplio.

Lo importante es crear una rutina constante, aunque sea con pocos minutos al día.
Puedes hacer una sesión corta por la mañana para activar tu cuerpo, o por la tarde para aliviar tensiones acumuladas y trabajar tu zona lumbar, caderas y core tras muchas horas sentado.

¿Qué tipo de ejercicios se pueden hacer con fitball?
Además de los ejercicios que ya mencionamos, existen muchas otras variantes que puedes incluir en tu entrenamiento con pelota:
- Sierra abdominal: en posición de plancha con los pies sobre la pelota, lleva el cuerpo hacia adelante y hacia atrás, activando el transverso y el abdomen profundo;
- Extensión de espalda: tumbada boca abajo sobre la fitball, eleva el tronco suavemente. Este ejercicio es ideal para fortalecer la parte baja de la espalda;
- Plancha lateral con apoyo en la pelota: trabaja los oblicuos, la estabilidad y la fuerza del tronco.
Recuerda que la clave está en mantener siempre el control del movimiento, buscar la activación muscular y no forzar rangos de movimiento si sientes incomodidad.

Entrenar con fitball es una excelente forma de tonificar, fortalecer y mantener tu cuerpo en forma con ejercicios sencillos pero muy eficaces.
Solo necesitas una pelota, un poco de espacio… y muchas ganas de moverte.
¿Preparada para darle una nueva dimensión a tu entrenamiento?